Con una comunicación clara por parte de los jefes, los colaboradores sabrán que a la empresa le importa que se sientan bien y valorados.
En México, el 33% de las organizaciones optará por quedarse con un esquema de trabajo híbrido este 2022, de acuerdo con proyecciones de la firma de capital humano ManpowerGroup. Sin duda, entre los diversos factores clave para obtener buenos resultados, destaca la labor de los manágers comunicando los siguientes puntos:
¿Regresar a la oficina? Muchos colaboradores pueden dar argumentos muy válidos respecto a que trabajar desde casa los ha mantenido igual de productivos, o más. Es importante tener argumentos convincentes para animarlos a volver por unos días y explicar cómo será la dinámica de trabajo. Las ideas cortas, claras, son la regla para informar de forma asertiva. Así el proceso de aceptación será más fácil.
Para que tu fuerza de trabajo se sienta segura y confiada, cuéntales con detalle sobre las medidas que se implementarán en la oficina. Después del distanciamiento social y el aislamiento, es normal que surjan dudas y que, para muchos, sea mejor no volver. Es imprescindible una comunicación estrecha y cercana, donde el factor central es la ‘seguridad’ en todos los niveles, para que los colaboradores se sientan protegidos.
Asumir la actitud de 'todos deben regresar’, 'ya hay que volver al lugar de trabajo', puede incrementar la ansiedad en las personas. Cuando esta noticia se comunique, hay que cuidar el lenguaje y optar por ideas como: 'vamos a reabrir a retomar la dinámica en el lugar de trabajo. Plantear el regreso desde la flexibilidad y con empatía de la empresa genera reacciones positivas en lugar de estrés.
Rediseñar el lugar y transformarlo en un espacio atractivo, seguro, funciona, hará que los colaboradores quieran regresar a la oficina. Los responsables involucrados en planear el retorno necesitan planificar y repensar cómo tener áreas de reunión más cómodas, y siempre conectadas, por ejemplo.
Regresar después de mucho tiempo de trabajar de manera remota puede desequilibrar el bienestar de los colaboradores y ocasionar problemas con su desempeño. Para evitar que algo así suceda, hay que establecer medidas preventivas y apoyos, como los programas holísticos de bienestar, a través de los cuales el empleado obtiene recursos para mejorar su alimentación, mejorar su higiene del sueño, planes de activación física, gestión del estrés, entre otros. Los colaboradores sabrán que a la empresa le importa que se sientan bien y valorados.
Para entender mejor las necesidades de los trabajadores hay que reunir sus comentarios a través de ejercicios más frecuentes de retroalimentación. Esto ayudará a que la empresa detecte qué funciona y qué no y, a partir de ello, tomar otras mejores decisiones. Puede ser un buen momento para levantar una encuesta que ‘arroje’ el sentir del empleado.
La pandemia rompió con todos los esquemas generando incertidumbre. Es vital mantener una mente abierta para modificar regulaciones y directrices cuando sea necesario, así como armar un plan de cambios repentinos y estrategias para comunicarlo.
El líder no está exento de sufrir estrés y ansiedad por lo vivido en este período de pandemia y el retorno a las oficias. Ser parte activa de los programas de bienestar en la empresa, o impulsarlos, es clave para obtener mejor resultados en el modelo híbrido.